EE. UU. retira visas a funcionarios del Gobierno Petro

La relación diplomática entre Estados Unidos y Colombia atraviesa un momento crítico, luego de que el gobierno estadounidense decidiera iniciar el retiro de visas a funcionarios cercanos al presidente Gustavo Petro.
Esta medida es una respuesta directa a las recientes declaraciones del mandatario colombiano, quien insinuó la existencia de un complot en su contra liderado por congresistas estadounidenses.
Escalada de tensión diplomática
Fuentes del Departamento de Estado de Estados Unidos han confirmado que se están revocando formalmente o cancelando de forma discreta las visas de varios altos funcionarios, asesores y personas del círculo más cercano al presidente Petro.
El incidente diplomático se intensificó después de que el Presidente Petro señalara públicamente a los congresistas Carlos Giménez y Mario Díaz-Balart como los presuntos actores de esta “operación internacional”.
Ambos legisladores han rechazado categóricamente estas acusaciones.
En una contundente respuesta, el congresista Giménez calificó a Petro como un “drogadicto corrupto, patético, incompetente y peón del dictador Nicolás Maduro“, lo que ha escalado aún más la tensión entre ambas naciones.
Acciones y silencios
Como parte de las acciones diplomáticas, Estados Unidos ordenó el llamado a consultas de su embajador encargado en Bogotá, John McNamara.
Este gesto refleja el creciente malestar de Washington por el tono del jefe de Estado colombiano y el consecuente deterioro de las relaciones bilaterales.
La medida es interpretada como una advertencia directa y forma parte del protocolo que aplica Washington ante situaciones que comprometen la cooperación y el respeto institucional.
Voceros del Departamento de Estado han señalado que el retiro de visas es una herramienta común cuando se considera que un gobierno no ofrece garantías de cooperación ni mantiene un discurso respetuoso hacia sus aliados.
Hasta el momento, el Gobierno colombiano no ha emitido una declaración oficial frente a las revocaciones, mientras se espera un pronunciamiento del Ministerio de Relaciones Exteriores para evaluar el alcance diplomático de esta crisis.